Nuestro club fue sancionado con un cierre de cancha por los cánticos insultantes denunciados por los árbitros en el partido frente a Atenas.
Al tratarse de un castigo redimible, se decidió abonar una multa para jugar como locales en nuestro escenario esta noche frente a Lagomar, priorizando el aspecto deportivo y la fiesta en casa.
No obstante, esta sanción, además de generar un perjuicio económico al club, empeora su legajo de antecedentes y lo expone a sanciones más importantes que van desde quita de puntos hasta la desafiliación.